Cuando contamos una historia, ¿somos los héroes o los villanos?
Sí, somos los héroes. O las víctimas. Quiero decir, a nadie le gusta quedar mal en su propia historia. Decimos "ese jefe ingrato me despidió" pero no cuentas que estabas viendo Betty la fea en horario laboral, pillín.
Cuentas que tu nefasto ex te dejó porque no te valoró (ajá pero ¿y los cachos que le montaste con su hermano?) NO SE HABLA DE BRUNO, NO, NO, NO.
Y podría decir un sinfín de ejemplos, pero no vinimos a hablar de eso, hoy hablaremos de "Límites"
Entonces Andy, ¿De qué viene esto al caso?
Sí viene, aquí vamos:
Hace dos semanas alguien me contaba que sentía una enorme frustración por un amigo que no se valoraba. Este muchacho al que llamaremos "platanito" está perdidamente enamorado de una chica que no le presta mayor atención.
Platanito la acompaña a todos lados, la escucha, le da amor, cariño y atenciones pero esta chica parece hacer caso omiso ante estas atenciones y su amiga ya no sabe cómo hacerle ver que esa situación es insana.
Mucho se habla de ponerle límites a los demás. Si una persona te hace daño, te alejas. Si te están faltando el respeto, tu deber es reflejar tu descontento y darte tu lugar, pero... ¿Y qué cuando esos límites los necesitamos nosotros?
[Pausa dramática para sentirse ofendido]
No te ofendas, no me refiero a que necesitas que "alguien más" te ponga en tu lugar (aunque si toca, toca). Me refiero a ti contigo mismo.
No nos gusta recibir respuestas negativas, ni que nos rechacen, o que nos digan qué hacer, lo sé. El problema es que nos damos rienda suelta y terminamos ofendiendo a otros y a nosotros.
Porque el no saber cuál es nuestro lugar es una falta de respeto hacia nuestra estimación personal. Si una persona no te quiere en su vida y te ha dado señales de ello, ¿Por qué insistes?
"ES QUE NO ME HA DICHO QUE NO ME QUIERE EN SU VIDA"
Aquí la cosa cambia un poco... Tienes que encararle.
Sientes que te están rechazando pero no te lo dicen de frente. Ahí tienes que ir tú y preguntar qué está sucediendo porque no mereces la incertidumbre. A veces no es rechazo, a veces es falta de comunicación. Le importas pero sacó 0 puntos en el examen de exteriorizar las emociones.
Ahora bien, con la otra parte, si ves que una persona está insistiendo en tu vida y sabes que te quiere para algo más que ver Phineas y Ferb en el televisor de la sala de su casa pero tú no quieres nada más que una amistad, ¿Por qué no le has puesto límites? ¿Por qué no le has dicho a ese amigo tuyo que siempre se burla de ti, que eso te hace sentir mal? ¿Por qué sigues permitiendo que tu hermano tome tus cosas sin pedirlas si sabes que eso te molesta?
Y sí, todo esto parte del amor propio.
Debes entender lo mucho que vales para que le hagas ver a los que no te están valorando que mereces respeto, tu tiempo, dedicación y amor valen.
Platanito debe entender que si esta muchacha no está interesada en él, debe respetar su decisión y alejarse. Acosar solo marca una barrera más grande que al final se convierte en un resentimiento que no merece ninguno de los dos.
Platanito debe entender que si esa muchacha no lo quiere, no es por él. Sencillamente ella está buscando otras cosas que él no tiene y eso no tiene nada de malo. No es responsabilidad de otros lo que nosotros sentimos por ellos.
Platanito tiene que aprender a darse valor y respetar el espacio y el valor ajeno.
Primero debemos amarnos para saber cuándo estar y cuando retirarse; segundo, debemos saber cuándo decir "no" para no confundir ni lastimar a los que esperan un "sí' de nuestra parte.
Ama mucho, pero ámate a ti primero.
(Todos fuimos un platanito alguna vez. Espero que después de esto, te des el valor de la tajada suculenta que sí eres)
Comentarios
Publicar un comentario