Mucho se habla del amor propio y es una búsqueda incesante que todos llevamos a cabo desde la primera vez que nos hablan de él, como si éste fuera el Santo Grial de la adultez y la pieza faltante para la "madurez emocional".
"Quiérete, olvidale ya", "Tienes que amarte un poco y superar esa ruptura de una vez".
Debo decirles que nadie decide cuánto pesa tu dolor, sencillamente sientes la carga cuando cae sobre tí y tú eres quién decide hasta cuándo vas a llevarlo sobre tus lomos.
Pero, si es una carga tan pesada, ¿Por qué no soltarla y ya? Bueno, el dolor es lo último que nos queda cuando una persona se va de nuestras vidas y por mucho que nos parta las espaldas y nos cueste avanzar, no lo soltamos a las primeras por no querer perder lo que nos queda de ese alguien.
¿Qué prisa tiene en olvidar aquél que construyó su amor rama por rama hasta que tuvo un casa? Una casa que le hizo techo y no se mojó en la lluvia; una casa que le cubrió del frío; una casa a la cuál llegar después de pasar un día fuera de ella.
¿Qué prisa tiene en olvidar aquél que ya no tiene esa casa, solo tiene escombros y pasa los días recordando el calor que ya no siente?
Que no estés listo para olvidar no te hace amarte menos. Claro, no es como que vas a leer esto y vas a ir corriendo a decirle a esa persona que regrese a tu vida porque ahí sí estarías cuestionando el valor que te tienes. Hablo de abrazar la pérdida.
La única forma de avanzar es entender que justo ahora no estás listo, que necesitas unos días más. Deja de condenarte tanto por no superar a las primeras, si quisiste con el alma, entonces ella necesitará tiempo para reponerse.
Te aseguro que una vez que decidas no llevar más esa carga contigo, tendrás unas piernas, unos brazotes y un corazón listo ¡para seguir dándole con todo a la vida! Pero mientras tanto, haz las paces con tu dolor.
Perdónate por juzgarte tanto; entiende que si alguien no quiere estar en nuestras vidas no le hace malo, sencillamente no somos lo que esa persona necesita y eso no está mal; quédate con lo mejor de esos días, y todo esto hará una mejor versión de ti.
Ig: @andyescribe
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ResponderEliminarMe encanta <3
ResponderEliminarGracias por leer!
EliminarMe pasó y dije que aún me duele. Un amigo que dijo: que no te duela! Pues sí me duele, en algún momento pasará pero nadie puede decirme hasta cuándo. Y, definitivamente, la mejor versión de mí (hasta ahora) llegó.
ResponderEliminarNadie tiene derecho a decirte cuándo dejar de sentir o en qué momento dejará de importarte. Tú eres la que sabe cuánto de ti invirtió y dejará de doler cuando estés lista. Es tú proceso, de nadie más.
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